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Semana Santa: Cultura, historia y religión

¿Considero a Guatemala como un país rico?

Con el paso de los años, se han transmitido de generación en generación diversas tradiciones y costumbres que enamoran, tanto a nosotros, los chapines, como a los turistas. Esto sucede por la mezcla de culturas, etnias, colores, símbolos, comidas, música y la pasión en cada actividad. 

Por tanto, la respuesta es sí. Guatemala es un país infinitamente rico gracias a nuestra diversidad, costumbres y mezcla de culturas.

Estas tradiciones vivas deben ser preservadas y continuar compartiéndose, ya que forman parte de nuestra identidad y legado. En ese sentido, en estos últimos 15 años, cuatro manifestaciones han sido declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO: La tradición del teatro bailado Rabinal Achí, la lengua, la danza y la música de los garífunas, La Ceremonia de la Nan Pa’ch y, finalmente, la Semana Santa.

Estas manifestaciones culturales nos representan, son un reflejo de nuestra riqueza, diversidad e identidad nacional, y fortalecen nuestro sentido de pertenencia y orgullo colectivo. Por esa razón, incluso las entidades internacionales más reconocidas pueden ver su trascendencia.

De tal forma que la Semana Santa fue nombrada Patrimonio Cultural en el 2022, durante la reunión del Comité Intergubernamental para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial. En este evento, todos los representantes tomaron la decisión unánime de incluir a esta fiesta dentro de las manifestaciones culturales vivas más importantes de nuestro país, gracias al fervor religioso, artístico y turístico con los que los guatemaltecas la celebramos.

Esta festividad conmemora los últimos momentos de la vida de Jesús y en el 2023 se celebrará del 02 al 09 de abril. Durante estos días, miles de devotos visitan los altares religiosos, confeccionan alfombras con aserrín de colores, realizan vigilias y procesiones. Sin duda, es una tradición que identifica la religiosidad guatemalteca.

Por tal motivo, se involucran muchos feligreses como las hermandades o cofradías que se encargan de cada procesión. También podemos observar una banda de músicos que acompañan los cortejos procesionales, personas que portan vestimenta de romanos y palestinos, y gran cantidad de cucuruchos y devotos cargadores.

Es así que los que vivimos este hermoso ritual religioso, podemos observar una fusión de culturas entre el catolicismo que proviene de España y nuestras creencias ancestrales mayas. Un claro ejemplo de ello es la figura de la mariposa que elaboran en una alfombra de aserrín, por donde pasan las andas procesionales. Esta simbolizaba el Sol, la vida y el más allá, para los mayas.

Sin duda alguna, es una máxima expresión de nuestra fe, tolerancia, respeto y cohesión social entre las comunidades. Así como esta manifestación cultural, podemos encontrar muchas más, donde cada una tiene una historia, significado y propósito que los guatemaltecos nos esforzamos por mantener vivo. 

Sigamos involucrándonos en nuestras tradiciones y difundamos en cada rincón del mundo para que conozcan lo hermoso y verdaderamente rico que es Guatemala.