POR UN SIGLO MÁS TRABAJANDO PARA EL DESARROLLO DE LOS PAÍSES DONDE OPERAMOS
Octubre representa para la familia Progreso un mes de celebración. Cumplimos 123 años de historias, aprendizajes y crecimiento marcados por la experiencia de todas las generaciones que han dejado huella en la compañía. Nuestro mayor motivo de orgullo es haber contribuido al desarrollo de Guatemala y la región, a través de la generación de empleo y oportunidades de negocio y la inversión social.
Si nos remontamos un momento a los inicios de Progreso, todo comenzó con una idea visionaria, arriesgada e innovadora de Carlos F. Novella. Fuimos una de las primeras empresas de cemento en Latinoamérica, y empezamos a hacer historia en la finca ‘La Pedrera’. La investigación y la adaptación al cambio de los tiempos y a las nuevas necesidades del mercado, nos ha permitido desarrollar productos innovadores y de una calidad excepcional para convertirnos en el proveedor favorito de nuestros clientes.
Hoy más que nunca, Progreso sigue haciendo honor a su nombre, al generar oportunidades de desarrollo y crecimiento dentro y fuera de Guatemala. El crecimiento que hemos logrado nos permite tener operaciones en países como Honduras, Panamá, Belice, Colombia, El Salvador y Costa Rica, y podemos confirmar que el paso del tiempo consolida nuestros valores y nuestro propósito. Cada día, nuestro trabajo responde al propósito que nos identifica: “Construir juntos el país donde todos queremos vivir”.
Me alegra poder decir que la visión y el legado de Carlos F. Novella se mantienen vigentes y el espíritu emprendedor e innovador que marcó la fundación de esta empresa se conserva. Este principio de vida orientado al impulso del desarrollo es el que queremos dejar de herencia a las siguientes generaciones al transmitir la esencia progresista que nos caracteriza.
Nada de esto sería posible sin el equipo de primer nivel, que ha demostrado su fortaleza y profesionalismo ante los desafíos propios del negocio y los retos que nos impone la vida. Aunque la pandemia del COVID19 nos sorprendió y nos exigió reformular nuestros objetivos, hoy podemos ver que la crisis nos hizo más innovadores, más resilientes y más solidarios.
La esencia de lo que hacemos está en las personas que hacen posible cada nuevo logro de Progreso. A ellos, a la gran familia Progreso, ¡GRACIAS!. Sigamos trabajando juntos para continuar sumando años de experiencia, de avances para la industria y de un impacto positivo en la vida de las personas con las que interactuamos.