Estamos a muy pocos días del 31 de diciembre y nos despedimos del 2022 para dar la bienvenida a un nuevo año. El año que está por terminar ha sido uno retador en muchos aspectos, pero lo importante es mirar hacia atrás y sacar un balance positivo de todo el trabajo y esfuerzo realizado para seguir adelante, avanzando en el camino hacia nuestras metas.
Los últimos instantes de un año suelen ser un momento en el que ponemos sobre la mesa todas nuestras mejores intenciones y deseos para el año que está a punto de comenzar. Para muchos de nosotros, esta es la época para compartir y celebrar con nuestros seres queridos, pero también, es un momento para reflexionar sobre el pasado, pensar en las necesidades de los demás, soñar con nuevas posibilidades, además de establecer los objetivos y retos que buscamos cumplir en los siguientes 12 meses. Cuando un año está cerca de su fin, recordamos todas las cosas vividas, repasamos las lecciones aprendidas y buscamos prepararnos para las sorpresas que el año nuevo traerá.
Los años que vivimos nos enseñan y nos fortalecen. Sin embargo, hay años que ponen a prueba nuestra capacidad para resistir y para reinventarnos ante los más inesperados acontecimientos. En Progreso, no hemos parado de trabajar, y lo hacemos desde la unión; elaboramos desde nuestra región, proyectos ambiciosos con el fin de mejorar las expectativas, pues al final del día, ¡todo debe cambiar para mejor!
Quiero agradecer la confianza de todas y cada una de las personas involucradas en hacer posible nuestra llegada a Costa Rica y El Salvador, marcando un hito para el que veníamos preparándonos desde hace mucho tiempo. Gracias a la dedicación de toda la familia Progreso, hemos podido estar a la altura de las expectativas del negocio, pero sobre todo, de nuestros colaboradores y de los nuevos mercados en donde ahora operamos. Significa mucho para mi poder celebrar estos acontecimientos con satisfacción, tras haber alcanzado nuestros objetivos, trabajando cada día para crear valor y mantener nuestro compromiso responsable con la sociedad.
Guatemala tiene un plan; un plan para un modelo económico, empresarial, comercial e industrial sostenible, basado en la innovación y en las posibilidades de desarrollo. Creo que estamos dando los pasos adecuados y tenemos una hoja de ruta clara, la cual supone una oportunidad para reforzarnos, remontar el vuelo y hacerlo de una forma distinta: funcionando mejor, más unidos, siendo más eficientes, más ágiles y más productivos.
La incertidumbre de estos últimos años nos ha cambiado la vida, pero al mismo tiempo nos está poniendo a prueba ante los ojos del mundo. La solidaridad por naturaleza reconoce los intereses comunes y se extiende más allá de todas las fronteras nacionales, abarca la diversidad y actúa para que todos tengamos igualdad, dignidad y voz en un futuro compartido. Nos hemos visto inmersos en una experiencia jamás imaginada que indudablemente ha tenido un profundo impacto en todos nosotros. Sin embargo, hemos constatado nuestra capacidad y fortaleza como país y, aunque aún queda mucho camino por andar, nos sigue uniendo la esperanza y el espíritu de que juntos saldremos adelante.
Acabemos el 2022 valorando su presente y recibamos el 2023 con la esperanza que nos caracteriza. Comparto nuestros mejores deseos para nuestros seres queridos, nuestra querida Guatemala y los distintos países donde operamos, y sobre todo, para la gran familia Progreso. ¡Por un año nuevo en el que sigamos generando valor en cada región y construyendo juntos el país donde queremos vivir!